Qué sería de Córdoba con un puerto como el de Rosario o Bahía Blanca… seguramente más poderosa que un país como Uruguay y posiblemente Paraguay y al nivel de Perú. En los 4 Párrafos de hoy pasamos de la ciudad al campo, la construcción y la macroeconomía.
Gauros: 2.000 casas instaladas y 200 nuevos clientes/mes
Los argentinos van dejando prejuicios sobre las nuevas formas de construcción y cada vez más entienden que el wood (y el steel) frame ganan por goleada en una cuenta “a favor” y “en contra” en materia de técnicas constructivas.
Gauros es una de las nuevas empresas que se subió temprano a esta ola y -desde 2015 cuando la creó Carlos Ramos– ya lleva entregadas casi 2.000 casas prefabricadas, mientras su plan comercial suma 200 nuevos clientes al mes y entrega (instala y da las llaves) unas 50 unidades mensuales.
Con su sistema de “entrega programada”, Gauros ofrece un plan de cuotas con el que se debe pagar (desde $ 4.000/mes) entre el 60 y 70% de la vivienda y -tras la posesión- ofrece un plan de pagos de hasta 36 cuotas, con interés.
Con dos plantas de producción (Córdoba y Neuquén), en Gauros trabajan 120 personas que atienden también los mercados de Río Negro, Chubut, San Juan y Mendoza. En Córdoba, acaban de inaugurar sobre calle Tejeda, en el Cerro su nueva sede central y un show room con casa modelo incluida donde se puede ver todo lo que es factible hacer en las más de 20 tipologías que ofrece la empresa.
De agua somos y el agua nos alimenta
Aunque suena ilógico, un cultivo hidropónico (sin tierra) necesita 80% menos del agua que precisaría la misma variedad implantada. Además, es mucho más eficiente en el espacio (25 unidades por m2 contra 9 del sistema tradicional), más rápido (2 meses de producción contra 3) y las hortalizas y otros vegetales llegan impecables, sin tierra ni suciedad.
La empresa Midory es pionera en esta tecnología que avanza en el mundo y -además de lechugas y otras variedades de hoja- están produciendo berenjenas, tomates cherry y van por pepinos, pimientos dulces y otras especies con las que buscan impulsar el consumo de vegetales que -en Argentina- viene muy por detrás de la media.
Aunque la pandemia pegó fuerte y están al 50% de la capacidad productiva de su invernadero, Sergio Guillaumet no se desalienta: se volcaron al comercio electrónico para llegar más al consumidor final (los restaurantes son tradicionales buenos clientes) y ofrecen a los hogares -además de hortalizas- mix de vegetales congelados para relleno de tartas.
Además, la empresa planea montar Midory Urbanos, unidades de producción hidropónica para barrios como Manantiales, Valle Escondido o Docta y mira con atención el nuevo régimen de cultivo de Cannabis para aplicaciones medicinales, una especie que también es muy conveniente de producir con hidroponia.
Córdoba, la provincia líder en soja + trigo + maíz
Dios atiende en Buenos Aires y “el puerto” agroindustrial del país está en Rosario, pero este año la provincia de Córdoba liderará, por primera vez en la historia, la producción de la cosecha sumando los 3 cultivos más importantes: soja, maíz y trigo.
De todos modos es justo mencionar las oportunas lluvias en esta perfomance, nuestra provincia también es líder en cantidad de vacas lecheras, en fabricación (y patentamientos) de maquinaria agrícola, además de ser líder en maní.
Aunque la provincia de Buenos Aires tiene el doble de territorio cultivable que Córdoba, aquí se producen 14 millones de toneladas de soja/año, contra 12 millones en los pagos que gobierna Kicillof (en Santa Fe se cosechan menos de 9 millones). En maíz, la diferencia es mayor aún: 24 millones de tn. en Córdoba contra 14 de Buenos Aires y 9 de Santa Fe.
Pese a que la soja es más conocida y tiene un valor por tn que duplica al maiz, este cereal rinde tres veces más por hectárea y -cuando el clima acompaña- eso se siente.
En los últimos 10 años, la provincia mediterránea triplicó su área maicera y cuadruplicó su cosecha, en base a un incremento del rinde por hectárea del 50%.
Con estos números en mano se entiende muy claro por qué Schiaretti defiende tanto el campo de las embestidas nacionales, ¿no?
Un pasito pa´delante, dos pasitos para atrás
Un trabajo reciente, elaborado por el Ieral, el instituto de Economía de la Fundación Mediterránea, concluye que el año pasado, durante el primer año de gestión de Alberto Fernández, la presión impositiva creció 1,5 puntos y la perspectiva es que este año suba casi un punto más, dando así por tierra definitivamente con el proceso de baja que se había iniciado en la gestión anterior de Macri.
En efecto, entre 2015 y 2019 la presión impositiva argentina había logrado bajar del 33,8 al 30,9% del PIB, casi 3 puntos, pero, el año pasado, en el 2020 creció hasta alcanzar el 32,4% y este año apunta a llegar al 33,1%
En 2002, antes de que los Kirchner llegaran al poder, la presión impositiva del país era del 19,3% del PBI. En 2015, cuando CFK dejó el gobierno, había escalado al 33,8% del PBI. La friolera de casi 15 puntos porcentuales, en 13 años.
En paralelo, hace 20 años, el gasto público argentino representaba el 30% del PBI, hoy representa el 47% del PIB. 17 puntos más. Con estos números, Argentina tiene uno de los mayores pesos del Estado en la economía en Latinoamérica, sólo superado en el mundo por algunos países europeos, aunque con una diferencia notable en la calidad y eficiencia de los servicios públicos.
Agenda de la Semana 23
- Lunes 14 a las 17: Daniel Zovatto, en la Bolsa de Comercio, evento virtual
- Martes 15 a las : Jorge Vasconcelos y Jorge Remes Lenicov en Fundación Mediterránea, evento virtual.
