Junto a la ciudad de Ushuaia, el cerro vive una de las mejores temporadas de invierno de los últimos años, gracias a la abundante caída de nieve que asegura que la montaña estará en óptimas condiciones hasta principios de octubre, haciendo posible una temporada extensa para los amantes del esquí y el snowboard.
Quienes ya visitaron el Castor, han sido testigos de sus condiciones naturales únicas. Su ubicación geográfica, sobre la ladera sur de la montaña, permite que la calidad de la nieve sea óptima. A su vez, han podido disfrutar de sus instalaciones y conocer la variedad de servicios.
Pero más allá de las bondades naturales, el Cerro Castor invierte permanentemente en tecnología ofreciendo una experiencia diferencial a quienes lo eligen: un sistema de aerosillas y teleskies (que aseguran además la fluidez de circulación para que no se generen filas extensas), un exclusivo sector de magic carpets para principiantes, y la incorporación de sistemas digitales para todos sus servicios.
Además, desde el año 2004 cuenta con una red de cañones de fabricación de nieve artificial (un total de 28 cubriendo más del 30 % de la superficie con nieve artificial) que permite garantizar (de ser necesario) buenas condiciones para esquiar en toda la temporada.
Los cañones de nieve
Existen dos tipos de cañones de nieve o snowguns: las denominadas lanzas y los cañones de turbinas. «Las lanzas son caños largos y los cañones de turbinas son como ventiladores. La diferencia es la capacidad de fabricación que tiene cada uno. La turbina, con mayor volumen, se adapta mejor al viento. Las lanzas hacen menos nieve y si bien son más económicas, cuando hay viento no funcionan bien”, señala Gastón Begue, presidente y director operativo de Cerro Castor. Además, la temperatura de arranque tiene que ser más baja que en los cañones de turbinas. Es decir: tiene que hacer más frío para que arranquen.
El momento de fabricación generalmente es a la noche, cuando se registran las temperaturas más bajas.
“El principio de fabricación de nieve es inyectar en el aire partículas de agua lo más chicas posibles, para facilitar su transformación en partícula de nieve en temperaturas frías. Es como regar la pista a cierta presión, rompiendo las partículas de agua en partes lo más chiquitas posible, se transforma en nieve y luego, cuando se derrite, vuelve a ser agua y continúa su ciclo”, explica Begué.
Infraestructura ecofriendly
La infraestructura instalada en Cerro Castor asegura la provisión de agua y todas las conexiones eléctricas para que el sistema funcione. “Cerro Castor utiliza el agua del río de la base, y es importante destacar que toda esa nieve vuelve naturalmente al río cuando se derrite, sin ningún tipo de aditivos químicos”, detalla Gastón.
En el año 2018, en la zona este de la montaña, se trabajó el terreno generando un lago artificial para poder abastecer esta red de nieve artificial de la zona este.
Venta online y lockers premium
El Cerro ofrece hoy la posibilidad de sacar pases, alquilar equipos, y reservar clases de esquí o snowboard, todo de manera digital, a través de su página web www.cerrocastor.com.
Otro de los beneficios es el alquiler de lockers automáticos: un sector de 150 lockers premium de última generación, con sistema de secado automático, capacidad para 2 equipos de esquí y/o snowboard, botas y cascos, que se abren directamente con el pase. Están ubicados en Rental Alpino y es otro de los diferenciales valorados por quienes vistan el centro de esquí más austral.
