Cada vez más argentinos adoptan los medios digitales de pago, al punto de prescindir de billeteras físicas, dinero en efectivo o tarjetas.
Las transacciones con QR se triplicaron frente a 2023, alcanzando 157 millones en el último cuatrimestre de 2024, con un notable protagonismo de los sectores socioeconómicos más bajos, que históricamente estuvieron alejados de la bancarización. Este método es simple, seguro y utilizado por todas las generaciones, con un ticket promedio de 17.540 pesos y predominio en supermercados, pequeños comercios, gastronomía y farmacias. Además, el QR interoperable, vinculado a cuentas bancarias o billeteras digitales, ha revolucionado la manera de operar en un país donde el uso de efectivo resulta cada vez más engorroso.
El crecimiento también se refleja en otros medios electrónicos, como las transferencias inmediatas, que crecieron un 47% respecto al año anterior, y los cheques digitales, que superaron por primera vez a los físicos, representando el 71% de los montos totales transaccionados. Este avance no solo responde a la conveniencia de los pagos digitales, sino también a la creciente digitalización financiera del país, impulsada por la facilidad de uso y la masificación de herramientas digitales que abarcan todos los niveles socioeconómicos.
