La tecnología avecina grandes cambios en materia de movilidad, desde la manera en que se fabrican los vehículos hasta cómo los conducimos. ¿Cuál es el impacto de la IA en el futuro de la industria?
La inteligencia artificial está marcando el rumbo del futuro, y la industria automotriz es testigo de estos avances. Actualmente, las terminales automotrices de todo el mundo están adoptando esta tecnología para optimizar sus procesos y obtener mejores resultados.
Según Sebastián Di Domenica, especialista en tecnología, la IA está transformando tres dimensiones clave de la industria automotriz: la fabricación de vehículos, la experiencia del usuario y los modos de conducción.
El primer aspecto está vinculado con la fabricación y el diseño de vehículos, y tiene relación con el aumento en la cantidad de robots y sistemas impulsados por IA en las terminales automotrices. Esta tecnología no solo facilita el diseño y la innovación en los autos, sino que también optimiza los procesos de fabricación, reduciendo errores y costos, y promoviendo prácticas de producción más sostenibles.
Otro aspecto clave es cómo la IA está transformando la interacción entre el conductor y el vehículo. La industria trabaja en sistemas que permiten a los autos adaptarse automáticamente a las preferencias del usuario, personalizando funciones como la climatización, el arranque y el entretenimiento a bordo, entre otros aspectos. En este sentido, el futuro del automóvil es un vehículo que aprende de su usuario y responde de forma intuitiva a sus necesidades.
Finalmente, la conducción autónoma es, quizás, el cambio más disruptivo que se avecina. Di Domenica explica que se proyecta que el 14% de los autos en Estados Unidos y el 34% en China serán autónomos en 2035. Este avance, impulsado por la IA, no solo transformará la movilidad de las personas, sino que también tendrá un impacto profundo en la industria, los consumidores y las ciudades.
Estos aspectos reflejan cómo la inteligencia artificial está destinada a redefinir el futuro de la industria automotriz, desde la manera en que se fabrican los vehículos hasta cómo los conducimos.