fbpx

A 25 años de Motorola en Córdoba: el inicio de un polo tecnológico con proyección global

Jun 18, 2025

La multinacional instaló en 2001 un centro de desarrollo de software que formó profesionales, impulsó estándares internacionales y contribuyó a construir el ecosistema tecnológico local.


Un cuarto de siglo después del anuncio que marcó el desembarco de Motorola en Córdoba, excolaboradores de la compañía se reunirán para conmemorar la instalación del Centro de Desarrollo de Software que operó entre 2001 y 2012. La llegada de la firma estadounidense fue posible por un acuerdo con los gobiernos provincial, municipal y la propia empresa, firmado el 20 de junio de 2000.

El Motorola Argentina Center for Software (MACS) representó una inversión inicial de 10 millones de dólares y generó más de 250 empleos directos. En los años siguientes, más de 500 profesionales pasaron por sus oficinas. Muchos de ellos lideraron nuevos emprendimientos tecnológicos, se incorporaron a multinacionales o emigraron al exterior, ampliando el alcance del talento cordobés en la industria global.

Durante su funcionamiento, el centro obtuvo certificaciones de calidad como CMM y CMMI nivel 5, y promovió la formación de técnicos y profesionales en tecnologías clave. Más de 150 empleados se certificaron en Java y C, y se impulsaron vínculos académicos con universidades locales como la UTN, UNC, Blas Pascal y el Instituto Universitario Aeronáutico.

En un contexto donde el software argentino facturaba en 2000 unos 190 millones de dólares, con solo 35 millones provenientes de exportaciones, el proyecto de Motorola resultó disruptivo. En 2025, la Economía del Conocimiento en Córdoba emplea a más de 63.000 personas y representa el 11,2% del empleo formal. La provincia cuenta con más de 3.000 empresas del sector.

Aunque la compañía cerró sus oficinas en 2012, su impacto permanece. Excolaboradores destacan la cultura de calidad y la mirada global que dejó como legado. Para conmemorar la experiencia, impulsan la edición de un libro con testimonios y la organización de una cena de reencuentro. La iniciativa busca también inspirar a nuevas generaciones sobre el valor de las decisiones estratégicas en el desarrollo tecnológico local.

Share This