
La 10° edición de “La Noche de Nuestros Quesos” reunió a pymes lácteas de toda la provincia y propuso una curaduría artística para recorrer las distintas variedades. La segunda jornada tendrá lugar en Villa María.
La 10° edición de La Noche de Nuestros Quesos volvió a reunir a productores lácteos de Córdoba en un encuentro organizado por el Ministerio de Bioagroindustria y Apymel, con la colaboración de la Agencia ProCórdoba y el CFI. El evento tuvo lugar en el Cabildo Histórico y mantuvo el propósito de destacar la producción local, la diversidad de quesos y el trabajo de las pymes del sector.
En esta edición, la propuesta sumó un enfoque curatorial que buscó presentar los quesos como piezas artísticas. Las variedades fueron agrupadas en categorías sensoriales inspiradas en corrientes como el impresionismo, el expresionismo abstracto o el barroco. El recorrido museográfico invitó a observar texturas, colores e intensidades como parte de una experiencia estética integrada con la degustación.
El ministro de Bioagroindustria, Sergio Busso, señaló que la iniciativa representa “diez años de trabajo articulado con el sector privado para poner en valor la cadena láctea de Córdoba”. También destacó que el encuentro evidencia la importancia de la planificación conjunta entre Estado y empresas para potenciar la calidad y la identidad productiva. Desde Apymel, su presidente nacional Pablo Villano remarcó el objetivo de visibilizar el trabajo de productores e industriales y la calidad de los quesos elaborados en la provincia.
Más de 40 pymes participaron de la muestra, que incluyó categorías como quesos duros, blandos, hilados, saborizados, azules, semiduros con y sin ojos, quesos con mohos externos, variedades sin lactosa y productos elaborados con otros tipos de leche, además de dulce de leche, crema y manteca.
La segunda jornada del evento se realizará en Villa María, en el predio de la Plaza de la Música, junto al Anfiteatro Municipal Elpidio González. La ciudad, ubicada en una zona estratégica rodeada de tambos y rutas de acceso, funciona como un punto clave para la industrialización láctea. Las pymes del sector procesan alrededor de 20.000 litros de leche diarios y generan unos 10.000 empleos directos, en un esquema productivo basado en técnicas tradicionales, abastecimiento local y fuerte arraigo territorial.
